El 15 de octubre la ciudad celebra las fiestas en honor de Santa Teresa. Los festejos se inician con la proclamación del pregón de las mismas desde los balcones del Ayuntamiento. Gigantes, cabezudos y tarasca recorren las calles y se hace la ofrenda floral ante una de las esculturas de la Santa en el Mercado Grande.
El día de la festividad se celebra una misa solemne en la catedral y manda la tradición que durante la liturgia, la bandera de la ciudad se sitúe en el altar mayor.
Conciertos, toros, fuegos artificiales y actividades deportivas se desarrollan a lo largo de esta semana festiva.